Sitges, capital mundial del Patchwork
El término Patchwork, en su traducción literal, quiere decir ‘trabajar con pedazos o trozos’. Conceptualmente, nos ayuda a situarnos con este arte textil, que destaca por trabajar la unión de diferentes telas de todo tipo, para crear una pieza nueva. Pero ojo con simplificar y reducir su alcance: es mucho más que las colchas de retales multicolores que quizás os vienen a la cabeza. Es arte textil. Y el arte no tiene límites. Si no, no sería arte.
El Festival Internacional de Patchwork de Sitges, que este año se celebra del 24 al 27 de marzo, lo organiza la Asociación Española de Patchwork. Pero ya sabéis que nos gusta personalizar y poner nombre a los protagonistas. En este caso el foco ha de ser para Inma Farrero, que es quién está al frente, y para Belén Robles, tesorera del certamen y que tiene tienda propia en Sitges. Las dos, aparte de huir del estereotipo de la colcha de colores, también abren el abanico de aficionados y aficionadas: “El Patchwork no es una cosa de abuelas, ni mucho menos; pensamos en una aguja y tendemos a imaginarnos algo que sólo hacen personas mayores. Por eso nos gusta que la gente venga al festival y descubra las maravillas que, hombres y mujeres de todas las edades, hacen con las telas”.
Tanto Inma como Belén coinciden en la simbiosis creada entre el festival y Sitges. Inma es muy ilustrativa al explicarlo: “No es un festival que se hace en una localidad; es una localidad que tiene un festival”. El matiz es revelador del ambiente que se genera, “y en el que se implican los vecinos, los comercios, el clima, el paseo marítimo…”. De hecho, explican, muchos de los profesionales y visitantes que repiten cada año “no dicen que vienen al festival de Patchwork de Sitges…dicen que vienen a Sitges”. Belén, cuya tienda es siempre un termómetro, reconoce que “este año pinta muy bien; la gente tiene ganas de volver a salir y de venir en grupo al festival, de ver, comprar, aprender, pasear por Sitges…”.
Información práctica, como siempre. El festival, de acceso gratuito -con excepción de las exposiciones-, se acomodará en el Paseo de la Ribera, con tres carpas en las que se distribuirán los 109 expositores previstos. Una participación que sitúa a esta cita como un referente internacional. Una cifra para constatar esta relevancia: ningún festival europeo de patchwork ha reunido desde 2019 a más de 70 expositores. Por números y por identificación con la ciudad que lo acoge, el otro referente sería Houston.
Más cosas. Aparte de pasear, ver, preguntar y comprar arte textil, los visitantes podrán ver exposiciones y participar en talleres creativos, algunos para principiantes y de corta duración. La inscripción en este caso se hará in situ. Para los cursos profesionales, el trámite se ha de realizar a través de la web del festival.
Pues ya lo sabéis. El arte textil y Sitges os esperan. Y os sorprenderá la combinación, ya veréis...
12/01/2022
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